Trabaje en su marca personal
Cuando queremos destacar entre cientos de profesionales independientes, debemos asegurarnos de que el cliente se acuerde de nosotros. En lugar de proporcionar un currículum detallado, es preferible practicar el storytelling: cuente una historia, explique cómo se han sucedido sus experiencias. Incluya retazos de su personalidad y su vida privada en su trayectoria profesional (dentro de lo que se considera aceptable, claro está). Para conseguirlo, puede que haga falta excluir ciertas experiencias con el objetivo de concentrarse en los aspectos más relevantes. También es una buena oportunidad para hablar de sus proyectos personales, si es pertinente y resulta relevante para su trayectoria profesional: un viaje por todo el mundo, una misión humanitaria, un desafío deportivo, escribir un libro, renovar una casa, etc. La idea es que entiendan quién es usted y cómo trabaja.
Puede adaptar su discurso en función del cliente, si tiene la sensación de que tendrá más o menos interés en determinadas partes de su trayectoria. En cualquier caso, mantenga su autenticidad y no se invente logros para atraer a un cliente. Es preferible perder un encargo con honestidad que embarcarse en terreno resbaladizo por haber contado algunas mentiras.
Su autenticidad es lo que le permitirá entenderse con su cliente y trabajar en armonía.
Apueste por la descubribilidad
Cuando se trabaja por cuenta propia, hay que ser muy visible en Internet. Independientemente de dónde tenga presencia, ya sea en su sitio web, en las redes sociales o en las plataformas de profesionales independientes, debe reflexionar detenidamente en torno a las palabras clave que utilizará para definirse: para que los clientes le encuentren más fácilmente, debe elegir los términos que emplean los internautas en sus búsquedas. Hay palabras genéricas y populares, y otras más concretas; también debe utilizar sinónimos, evitar los términos demasiado específicos y poco conocidos, vigilar lo que hacen sus competidores… En definitiva, encontrar las palabras clave adecuadas lleva algo de tiempo y reflexión, pero es un preámbulo obligatorio.
Otra forma eficaz de aumentar su visibilidad es recopilar las opiniones de los clientes después de prestarles sus servicios. De hecho, cada contenido que añade es útil para mejorar su descubribilidad. Además, las reseñas de los clientes son una prueba social de su legitimidad y pueden ayudarle a terminar de ganarse la confianza de un cliente potencial. Si quiere reforzar su eficacia, opte por un sistema de gestión de las reseñas de los clientes. La plataforma se encarga de solicitar la opinión de los clientes y las autentica mediante la norma ISO específica para este tipo de actividad.
Por último, también es posible empezar a producir contenido para potenciar su descubribilidad. Tanto si elige publicar artículos, organizar un seminario web o grabar pódcast o vídeos, de nuevo, se trata de contenido que se suma al que ya tiene y le ayuda a mejorar su visibilidad. Es un efecto secundario nada desdeñable que le sitúa, a los ojos de su audiencia, como un experto: de este modo, mejorará a la vez su visibilidad y su credibilidad.
Reaccione a la situación y sea flexible
En una sociedad hiperconectada que se mueve a un ritmo frenético, la capacidad de respuesta es un requisito esencial. Responder rápidamente a sus clientes, tanto actuales como potenciales, resulta indispensable. Hemos perdido la capacidad de esperar y, si no da una respuesta un plazo de 48 horas, su cliente puede recurrir a otra persona. Sin embargo, evite responder inmediatamente: su cliente pensará, lógicamente, que no tiene nada que hacer, y así evitará desconcentrarse del trabajo con demasiada frecuencia. Todo es cuestión de medir bien los tiempos, pero una buena idea es reservarse uno o dos momentos al día para responder a las solicitudes.
En la misma línea, debe saber cómo ser complaciente cuando sea necesario, pero sin ceder a todos los caprichos de sus clientes. Si siempre acepta reducir los plazos, puede resultarle estresante, pero hacerlo de manera puntual es comprensible. Del mismo modo, si, de forma excepcional, el cliente necesita reunirse con usted a una hora más tardía, puede aceptar para ayudarle.
Es usted quien pone los límites donde quiere, pero si se muestra flexible de tanto en tanto puede resultarle bastante práctico.
Ser flexible también significa tener la capacidad de salir de su zona de confort para empezar a trabajar en temas o tareas con las que no esté familiarizado y con nuevos tipos de clientes. Todo el mundo tiene sus preferencias y temas favoritos, pero cuando se trabaja por cuenta propia, es esencial mantener una actitud abierta. Toda nueva experiencia aporta algo, ya sea en términos de habilidades o de contactos.
Estudie las recompensas
El tema de las tarifas siempre es un asunto espinoso para la mayoría de los trabajadores por cuenta propia. A veces, cuando estamos empezando, situamos nuestros precios por debajo de la media del mercado; de hecho, hay quienes malvenden sus habilidades esperando que una tarifa baja atraiga a los clientes. En realidad, sucede más bien al contrario. Una tarifa demasiado baja puede infravalorar su trabajo e inspirar desconfianza. Es cierto que los clientes prestan atención a los precios, pero también quieren un trabajo de calidad. Cobrar unas tarifas demasiado bajas hará que duden de la calidad de su trabajo.
En lugar de eso, piense en lo que un buen precio podría implicar para usted, en relación con su experiencia, el contenido del proyecto, el tiempo y la energía invertidos…
El otro asunto que debe tener en cuenta es que no es necesario que sus tarifas sean fijas. Si un cliente le pide un gran volumen o empieza a hacerle encargos con una mayor regularidad, puede ser una oportunidad para desarrollar su oferta y proponerle paquetes, tarifas preferentes, etc.
Aproveche sus relaciones
Obviamente, tener una red de contactos es esencial tan pronto como se empieza a trabajar por cuenta propia, y debe tratar de aumentarla. Para ello, nada como inscribirse en una asociación de empresarios o autónomos. De este modo, puede familiarizarse con el mundillo, intercambiar consejos, comentar las dificultades, participar en talleres de formación, pero, sobre todo, conocer a otras personas para, en un momento dado, recomendarlas. Estas redes operan sobre un principio de reciprocidad: para que otras personas nos recomienden, debemos recomendarlas y, así, todo el mundo tiene más oportunidades.
La otra idea, especialmente si se siente aislado trabajando por cuenta propia, es unirse a un espacio de coworking. Una oficina compartida promueve las reuniones y los intercambios, aumenta la productividad e incrementa la creatividad. Es otra forma de pertenecer a una comunidad y ayudarse mutuamente presentando contactos.
Por último, no podemos pasar por alto la necesidad de optimizar un perfil de LinkedIn. El perfil debe contener tanta información como sea posible, por lo que no dude en mencionar áreas de interés o proyectos significativos.
Publique o comparta contenido para que sea visible, y no olvide reaccionar o comentar las publicaciones de su red de contactos, mostrar una actitud amable y mantener el contacto.